Estamos trabajando mucho la manipulación de objetos y materiales, para que los niños vayan aprendiendo a coger bien las cosas, trabajar con los sentidos, colores, y conceptos en general.
Con unos tubos de cartón que me dieron en la tienda de disfraces Megumi, he hecho cuatro tubos que he decorado con dos colores cada uno de ellos. Estos colores son como unos pompones bicolores que tenía en el baúl de los recuerdos.
Los niños han decorado un cartón a su gusto con témperas sólidas, y hay que reconocer que ha quedado precioso y muy artístico.
Después hemos pegado los tubos y debajo de cada uno de ellos he puesto un cacharro de plástico.
El juego consiste en que los niños deben coger los pompones y echarlos por el tubo que está decorado de sus mismos colores, al caer dentro del cacharro transparente, se comprueba si lo han hecho correctamente. Sirviendo también de autoevaluación.
No es tan sencillo como parece, porque hay algún color repetido que se combina con colores diferentes, y hay que pensar un poquito. Pues ahora veréis lo bien que lo hacen ellos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario