La seño ha traído un nuevo robot a clase que se llama Kubo.
Les he dado las 4 piezas del puzle con el que se crea el tapete y tener el escenario por el que ellos mismos programarán al robot con las piezas de acción del proyecto.
Hemos visto unas fichitas que tienen flechas y los niños han sabido perfectamente para qué sirven.
Los niños han entendido enseguida el funcionamiento y han practicado libremente sobre el tapete del castillo, incluso creando sus propias historias.
Esto promete. Lo usaremos más veces, porque les ha gustado mucho y son unos expertos en programación. Seguiremos contando...
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